El director del nosocomio, Héctor Miguel Macías Amaya, detalló que, ante el elevado número de casos de coronavirus en la región, el Instituto decidió reconvertir el HGR No. 1 para la atención de la pandemia. No obstante, en ningún momento se suspendió la atención de citas, estudios y procedimientos prioritarios hacia pacientes que dependían de ellos, como las cirugías cardiovasculares y hematológicas.

“Desde el 8 de marzo se ha trabajado para recuperar nuestra capacidad de atención, alcanzando en el último mes dos mil 867 cirugías y hospitalizaciones, así como el otorgamiento de 12 mil 189 consultas de especialidades”, informó el director.

También se recupera la atención de Ginecobstetricia con 219 partos y 149 cesáreas, para lograr 368 nacimientos en el último mes.

Tras la pandemia, el HGR No. 1 es considerado un hospital seguro, ya que los pacientes de COVID-19 son atendidos en 60 camas totalmente equipadas en las instalaciones anexas al nosocomio.

El doctor Macías Amaya señaló que el Área de Urgencias opera al 100 por ciento dando servicio a la derechohabiencia, siendo Traumatología la especialidad más demandada.

Con 264 camas y 45 consultorios, se ha reactivado la atención de Cardiocirugía, Hemodinamia, Trasplantes, Onco Ginecología, Ginecobstetricia, Traumatología, Imagenología y Cirugía en su totalidad, servicios en los que se va a recurrir la rehabilitación para pacientes con secuelas de COVID-19.

El director del hospital informó que los pacientes que requieran de consulta externa de especialidades deben acudir a su Unidad de Medicina Familiar (UMF) para que se les agende y realice la referencia correspondiente, o bien, acudir a los módulos de los Técnicos de Atención y Orientación al Derechohabiente (TAOD) para recibir la información necesaria.

Cabe mencionar que las atenciones médicas se desarrollan bajo un estricto protocolo de seguridad e higiene para protección de las y los pacientes, así como del personal institucional adscrito a las unidades hospitalarias.

Es importante el uso de cubrebocas obligatorio durante la permanencia en las instalaciones médicas; lavado de manos con agua y jabón, uso de gel con base de alcohol al 70 por ciento y privilegiar la sana distancia.