Un sujeto que tripulaba un auto robado provocó este fin de semana una persecución policiaca que concluyó cuando al derrapar por el exceso de velocidad con que circulaba la unidad simplemente se apagó y así lo detuvieron.
De acuerdo a la información oficial a las 22:36 horas del 23 de octubre, agentes llevaban a cabo un recorrido de vigilancia en la calle Caracol, de la colonia Laureles, en Maneadero, cuando observaron un carro marca Honda, línea CRX, color gris y con placas de California, Estados Unidos, que circulaba en exceso de velocidad.
Tales características concordaban con un automóvil reportado como hurtado mediante C-4, mismo que había sido detectado por la cámara de vigilancia que se ubica en la delegación El Sauzal de Rodríguez, motivo por el cual lo intervinieron con códigos y sirenas.
Sin embargo, el conductor hizo caso omiso a los señalamientos, tomó una actitud evasiva ante la presencia policial y emprendió la huida, iniciándose una persecución sobre la carretera Transpeninsular hasta que en la calle Augusto Villa Nueva, esquina con Emiliano Zapata, el carro derrapó y se apagó.
Los uniformados descendieron de la unidad, identificándose como policías municipales e indicándole al conductor con comandos verbales que bajara del auto, para después verificar los datos vehicularon con apoyo de C4.
Como resultado, el radio operador en turno informó que contaba con reporte de robo, razón por la que le colocaron los candados de mano a Rafael “N”, le dieron lectura de los derechos constitucionales que le asisten como persona detenida, y lo trasladaron a la Estación Central de Policía.
En las instalaciones de la corporación local, al individuo se le elaboró la certificación médica, para posteriormente ponerlo a disposición de la Fiscalía General del Estado.