Un niño de 12 años de edad quien resultó lesionado por lo que se presume una bala perdida en la cabeza, esta ya fuera de peligro informó la Procuraduría de Justicia del Estado.
Como se informó con oportunidad, la madrugada del sábado Francisco Javier “N” de 12 años de edad fue trasladado primero a la clínica del Buena Pastor en San Quintín con una ojiva incrustada en el cráneo.
El menor de acuerdo a la información paseaba con sus amigos a bordo de un automóvil en San Quintín a la altura del fraccionamiento del mismo nombre cuando quedó inconsciente.
El menor fue atendido luego en la clínica 69 del IMSS en Colonia Vicente Guerrero y el mismo sábado trasladado a Ensenada donde quedó internado en el Hospital General.
Según el reporte, la ojiva se alojó debajo del cuero cabelludo y le ocasionó una fractura leve de cráneo, pero ya esta fuera de peligro e internado en el Hospital General.
La policía ministerial sigue realizando indagatorias en cuanto a cómo se dieron los hechos.