En la honra fúnebre, desarrollada en el Palacio Municipal, el Alcalde ensenadense recordó la vida de su gran amigo y compadre Alfredo “El Chato” Bernáldez; “Toda su vida nos dio una lección, una lección de amor”.

Señaló que cualquier persona que lo conoció, se ganó su cariño, porque siempre fue muy amiguero y siempre daba, amor, cariño, ternura.

“Conviví con él desde los setentas hasta el día de su partida, quiero decirles que con honestidad siento mucho su muerte y para mí fue más que un hermano, anduvimos en muchas aventuras juntos”, aseguró.

Pelayo Torres mencionó que Alfredo Bernáldez no ha muerto, debido a que siempre estará presente en la vida del Alcalde ensenadense; “porque siempre lo voy a traer en mi corazón, y en mi pensamiento”.

Agregó que vivió muchas anécdotas con quien fuera el Síndico Procurador de este XX Ayuntamiento de Ensenada, “siempre cuidándome, siempre diciéndome, compadre, yo estoy aquí para ayudarte”.

“Sé que desde arriba nos va a estar apoyándonos, nos va a estar aconsejando, viene a suplirlo un amigo de él y un amigo mío, Carlos Escobar, queda muy claro que Carlos va a seguir su ejemplo”.

Invitó a recordarlo como quisiera Alfredo Bernáldez Caravantes, “contentos todos, desde arriba nos está mirando, nos está diciendo ahí se quedan, échenle ganas, sean felices, porque yo ya estoy siendo feliz”.

Por último, Pelayo Torres dio sus más sentidas condolencias a todos los familiares y amigos, especialmente a sus hijos Alfredo Constantino Bernáldez Pérez, Carlos Alberto Bernáldez Pérez, Noely Bernáldez Pérez, Luis Eduardo Bernáldez Pérez, Carlos Alfredo Bernáldez Sarabia, Johanna Bernáldez Sarabia y Bárbara Roxana Bernáldez Sarabia, hijos del C. P. Alfredo Bernáldez Caravantes.