Considerado una de las principales cabezas del cartel de Sinaloa en Baja California Héctor Guajardo Hernández (a) “El Güicho” empezó su carrera delictiva en el municipio de Ensenada donde nació.
Adolescente de acuerdo a datos obtenidos por Ensenada.net fue detenido por primera ocasión e internado en el entonces Consejo Tutelar para Menores Infractores.
El delito del que fue acusado y el que durante muchos años presuntamente practicó era el robo, de vehículos y casa habitación.
La zona de operaciones, en los alrededores de la invasión Bronce de la que era vecino.
Posteriormente en algún momento de su vida ya adulta “El Güicho” se marchó de Ensenada y empezó a vivir entre Rosarito y Tijuana donde pasó de ser un ladrón a un distribuidor de drogas primero y luego a uno de los sicarios de “El Teo” Teodoro Simental, actualmente preso.
Hasta el 2009 “El Güicho” era solamente un personaje mas sin gran trascendencia dentro de la estructura del cartel de Sinaloa en Baja California.
De hecho se estima que en esa fecha estaba en el octavo peldaño previo a la cabeza del Cártel comandando entonces por “El Teo” quien tenía como subalterno inmediato a “El Muletas” y a otros.
Sin embargo era un hombre violento que fácilmente subía en las posiciones conforme los líderes de estos grupos de mafiosos iban cayendo.
El 31 de agosto del 2009 “El Güicho y el Boxer” fueron detenidos en Ensenada.
El incidente por el cual fueron capturados, un suceso violento en la carretera Transpeninsular, donde un hombre fue atacado por un grupo de personas procedentes de Rosarito con quienes tuvo un altercado en el semáforo ubicado frente al Ejido Chapultepec.
El Güicho con su familia y los otros con las suyas propias, iban rumbo al sur y en el camino se les atravesó un vehículo, que fue chocado por ambos lados, luego bajaron los sujetos y en el suelo además de una golpiza, despojaron a la víctima de cartera y celular.
Pero fueron detenidos identificándose entonces Héctor Guajardo Hernández (a) “El Güicho” con el nombre de Víctor Rojas Hernández de 30 años de edad.
En tanto “El Boxer”, Juan Miguel Valle Beltrán de 32 años, (entonces alguien muy poco conocido) se identificó con su propio nombre.
En esta unidad viajaban además Merardo Soberanes Lucio de 50 años y Tomás Tirado Osuna de 33
Pese a que estos sujetos fueron investigados, tras la aparición de media docena de abogados de Tijuana y se logró hacer una conexión como sospechosos de otros delitos, en el resto del país, no se les pudo comprobar ninguno.
El único por el que se les podía mantener detenidos era del de robo con violencia, sin embargo, la víctima sin que diera nunca razones de su decisión retiró todos los cargos.
La noticia de la detención en el 2009:
El Boxer, iba junto con él durante este hecho en el 2009.