Miembros de quince familias que viven a metros de la playa municipal se sienten inseguros por la operación de la empresa de desguace de barcos y astillero “Infraestructura y Servicios Portuarios”.
El grupo de residentes se quejó de supuesto material que se desprende de los trabajos en el astillero y que contamina el ambiente, el polvo penetra por las casas de madera, fierro y otros materiales ligeros.
Los supuestos afectados tienen más de 30 años viviendo a un costado del arroyo El Gallo, y se han dedicado a la renta de caballos para paseos por la playa como también mantienen una pensión para equinos.
Un representante de Infraestructura y Servicios Portuarios dijo que no hay quejas ciudadanas sobre el supuesto óxido pero que estarán al pendiente, y dispuestos para iniciar un diálogo pero dudan que se trate de óxido o un material tóxico.
Aunque fueron los primeros pobladores en esa área, con el paso de los años esa comunidad ha sido alcanzada por el desarrollo urbano entre hoteles, restaurantes e industria.
Compartieron que desde hace meses, por las tardes, se desprende un denso polvo color rojizo que se desplaza hasta sus hogares; los montículos de material se pueden distinguir desde 100 metros de distancia, también el movimiento de grúas, maquinaria y otros sistemas se pueden escuchar de lejos.
Aunque las familias han hecho de todo para proteger los vehículos del polvo cubriendo la carrocería con lonas, plásticos, cobijas, éstos aseguran que la espesa capa de polvo brillosa no es tierra sino óxido.
Incluso agregaron que en los últimos meses han detectado que los niños muestran signos de enfermedades respiratorias como estornudo, escurrimiento nasal y pecho constipado.
“Nuestros niños se están enfermando porque respiran todos los días ese polvo rojo que no es más que óxido”, mencionó la familia Pérez.
Hasta hoy la comunidad no ha realizado una denuncia ante Semarnat o sistema de Salud, porque cada día esperan que la actividad se detenga de manera definitiva.
Sin embargo, el representante de la empresa también reiteró que tienen todos los permisos necesarios para operar con altos niveles de seguridad.