Tras un año de trabajo y gestiones con los propietarios de la tierra, el funcionario calculó que en total fueron 23 millones de pesos los que invirtió el gobierno del estado en la obra que promete agilizar el tráfico hacia la zona sur.

Comentó que la prolongación tuvo sus complicaciones por los diferentes procesos de negociación y las afectaciones que se presentaron en la Colonia Ruiz Cortines, donde enfrentaron una sobreposición entre una parcela ejidal y títulos de propiedad privada.

“Esto nos llevó muchos meses de negociación, acuerdos y convenios ante el Tribunal en materia agraria para resolver esta problemática. Situación que ya quedó resuelta”, indicó.

Una vez que permitan la circulación vehicular, se abrirá un oportunidad para desahogar la alta concentración de unidades que registra la avenida Reforma, por el movimiento hacia el Centro de Gobierno, Palacio Municipal y escuelas públicas.

El siguiente reto, dijo el delegado, es seguir de la calle Hierro hacia el norte para conectarlo con la ciudad deportiva de Valle Dorado, donde también habrán predios privados que resultarán afectados, pero iniciarán pláticas.