Víctor Gallegos, Agente Inmobiliario, relata que antes de auto promocionar una propiedad debemos analizar nuestros conocimientos: facilidad para la mercadotecnia y los negocios, disponibilidad de tiempo, carácter para soportar críticas sobre tu inmueble (en muchos casos despiadadas) y no menos importante, si cuentas con el conocimiento adecuado sobre impuestos, notarías y dependencias de gobierno.

En la mayoría de los casos es muy difícil contar con todas las habilidades ya mencionadas sin tener que recurrir a un equipo de trabajo profesional o perder demasiado tiempo al tratar de promover tu propiedad y a su vez, evitar meterse en un problema por las cuestiones legales que implica la venta de una casa.

El Señor Gallegos de Bienes Raices Avante, señaló que en ocasiones no tener en cuenta todas las determinaciones legales puede costarle caro al vendedor, ya que estos pequeños detalles pueden derivar en impuestos extras o hasta la firma de documentos que podrían llevarte a perder tú inmueble sin antes recibir un solo peso.

Vender una propiedad es igual que tratar de cambiar el aceite de tu auto sin saber mecánica, arreglar un desperfecto eléctrico sin ser electricista o reparar las tuberías del hogar sin ser plomero: en todos los casos, si no es tu profesión, es probable que termines con un dolor de cabeza y no resuelvas el problema.

Acudir con un agente inmobiliario puede ser una apuesta de mayor seguridad, que si bien es cierto requiere una retribución económica, ofrece mayor certeza en el desarrollo de un proceso lleno de pequeños detalles que siempre deben tomarse en cuenta.

¿Está en proceso de vender una propiedad? Avante Bienes Raíces colocó en su sitio web una serie de consejos que pueden servirle.