Ociosidad situación de no trabajar, perder el tiempo o gastarlo inútilmente.

Eso es la reclusión en los hogares ensenadenses, pero cuando uno sale por necesidad para hacer las compras al supermercado reflexiona uno ¿Cómo le hace la gente pobre? Y cada vez más la gente de la tercera edad, clase media, familias jóvenes que pierden su capacidad de compra.

Ha transcurrido un mes, los recursos se agotan y no se vislumbra un plan de reactivación económica y el Presidente Municipal preocupado por evitar que salgamos pero no vemos una propuesta , respetamos la sana distancia; él preocupado por la reelección, los Diputados también preocupados por el ¨sufragio efectivo si reelección¨ y aprobar el incremento de impuestos, los Senadores tratando de no inconformar al C. Presidente, y él preocupado por Tren Maya, Aeropuerto Santa Lucia, Pemex. Comisión Federal de Electricidad y la Refinería de Dos Bocas.

¿Quién se preocupa del que vive y recibe al día su ingreso? ¿De los que tienen que salir a vender sus elotes calientitos, verdura, quesos, paletas, boleros, afiladores, albañiles, taxistas, trabajadores con contrato por obra y tiempo determinado? ¿Quién comprende su angustia?

Su preocupación es salir a comprar sus víveres, diariamente lo más básico. Tener que proporcionar un televisor para poder tener clases a distancia para sus tres hijos, computadora, útiles escolares, tener señal de internet y electricidad ¿Cómo hacen estos padres?

¿Cómo viven con sus preocupaciones? No saben si terminando la cuarentena tendrán trabajo, ¿Cuándo será su siguiente depósito o si ya recibieron el último? ¿Cómo costearan los gastos de una enfermedad? ¿Cómo pagarán los servicios agua, electricidad, gas, internet para las clases a distancia, los abonos a las tiendas? ¿Cómo explicarles a los hijos que ya no alcanza el dinero?

Ojala todos volteáramos a verlos, comprenderlos y si los vemos en la calle no criticarlos, apoyarlos en lo que podamos y que nuestras autoridades sean más comprensivos con los ciudadanos.

Ciudadano Armando Ayala Robles, Presidente Municipal, burócratas, Regidores, Diputados, Senadores, Presidente Andrés Manuel López Obrador, no somos invisibles y la incertidumbre nos daña, pido que ya no nos sigan dividiendo a los mexicanos, no más llamarnos: neoliberales, conservadores, fifís, no echarle la culpa a los empresarios, arquitectos, profesionistas y periodistas. Hacer que los funcionarios respeten la dignidad de las personas y abstenerse de seguir ofendiendo, no seguir echando la culpa a otros y aceptar su responsabilidad para buscar una pronta recuperación de nuestra patria: nadie tiene la culpa de la pandemia.