Han pasado quince días desde que un grupo de habitantes de Valle de la Trinidad se aventuró para buscar a un amigo desaparecido en un rancho abandonado y encontraron una fosa clandestina con restos humanos donde no se sabe aún si hay uno o varios cuerpos.
El hallazgo llamó la atención de familias de todo Baja California que esperan noticias de algún allegado desaparecido. Desde el 1 de enero han llegado al poblado madres, padres, hermanos, primos, todos en espera de que la Policía Ministerial extraiga el cuerpo para identificarlo.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) no ha dado información oficial sobre la situación del pozo, lo que mantiene en incertidumbre a quienes buscan los resultados.
“De nuevo nos prometieron que mañana (lunes 15 de enero) van a venir y que ahora sí traerán maquinas para sacar el cuerpo, estamos viviendo un momento de horror”, manifestó una madre quien se reservó la identidad.
Comentó que tienen días que entran Bomberas, Peritos y Policía Ministerial, pero una vez que oscurece dejan de trabajar y lo mismo ha sucedido en los dos anteriores fines de semana.
“Tenemos la esperanza de que en las próximas horas nos digan qué es lo que hay adentro, no puedo estar tranquila pensando que puede estar ahí dentro (su familiar)”, lamentó.
Unidos por los Desaparecidos en Baja California, Representado por Fernando Ortigoza, ha visitado el poblado junto con la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), ésta abrió un expediente a partir de una solicitud hecha a la defensoría por parte de la asociación civil.
“Se brindó acompañamiento en el lugar indicado y se abrió un folio. Derivado de esta solicitud, la Defensoría ha brindado atención victimológica a familiares de personas desaparecidas, asimismo hasta el momento no se han registrado posibles irregularidades en el actuar de las autoridades que den materia para la apertura de un expediente de queja”, indicó el organismo.