En el 2017 los ciudadanos de Ensenada se han enfrentado a un fenómeno delictivo inusual con un mayor número de robos con violencia, mayor contacto con armas de fuego así como agresiones verbales que lesionan la salud del afectado.
Quienes son víctimas de robo tardan por lo menos un año en recuperarse, y todos ellos sin excepción, ocupan terapia psicológica explicó la terapeuta en la Ciudad de México, Julia Borbolla.
“Después de una situación delictiva hay estrés postraumático donde el cerebro queda en alerta y si no hay ayuda la persona se puede quedar en esa situación un año, quizá dos o de manera permanentemente”, indicó la psicóloga visitó el puerto el pasado 12 de septiembre.
Borbolla comentó que los habitantes de las ciudades donde hay más delitos están alarmados, y ese efecto desgasta la salud generando un círculo vicioso.
Algunas víctimas que no tratan el problema viven constantemente en estado de alerta, buscan algo que los “aplaque”, es decir, suelen beber alcohol y después quieren animarse con drogas.
“Estamos engañando al cerebro con soluciones externas cuando la solución están dentro de la persona”, abundó la especialista en adicciones y tratamiento para adolescentes.
Insistió en que cuando alguien sufre violencia tiene que tratarla, hablarla, volverlo a vivir para saber qué sentimientos pasaron por su cabeza y si fue verdad o no, también saber qué tan probable es que vuelva a suceder.
Lo más importante es saber qué pueden hacer si vuelven a enfrentar una crisis similar, porque tomará precauciones y adquirirá conductas de autocuidado y no sólo pensará que no volverá a suceder.