El desarrollo de un criadero de insectos benéficos para atacar plagas de insectos nocivos en cultivos de la Zona Costa, fue planteado por el Comité Estatal de Sanidad Vegetal, indicó su titular Carlos Ochoa Zatarain.
El control de plagas mediante el uso de insectos benéficos, no es nuevo e incluso existen granjas especializadas en Baja California Sur y en Sonora donde se compran insectos benéficos, cuando se requieren en la zona costa de Baja California.
Pero el clima y el viaje afecta a dichos insectos, de ahí que la opción mas viable para la zona costa, sea la de contar con un criadero propio con animales que se adapten a las condiciones ambientales de la región.
De acuerdo a Ochoa Zatarain, una de las técnicas que más prospera en el combate biológico, es la liberación de machos estériles en zonas infestadas.
De hecho cuando se presenta una plaga existe una reproducción intensiva de un insecto que se manifiesta como el síntoma principal y puede generar problemas en cultivos y en la calidad de los productos, de ahí que la liberación de machos estériles es una opción de combate.
Antes de liberar machos estériles, se realiza un monitoreo mediante trampas que colocadas en puntos estratégicos de zonas sospechosas de plaga, permiten establecer la cantidad de hembras y en base a esto se emite luego una cantidad de machos estériles para romper los ciclos y bajar las poblaciones y con ello la incidencia de los insectos nocivos.
En Baja California el uso de controles biológicos, han sido exitoso en el algodonero donde se tuvo la afectación años atrás del gusano rosado, mientras en la zona costa, el riesgo latente podrían ser algunas moscas de la fruta si se tuviera ese material en cultivos intensivos.
Mediante el control biológico se pueden reducir presencia de lepidópteros (gusanos) de trips y palomillas dorsos de diamante que afectan principalmente a coles, a tomate, cebollín fresas y en general a lo que los agricultores llaman verdes y es donde se ocuparían los insectos benéficos, que para usarse deben llevar una justificación de fortalecer el control integrado.
Explicó que una de las tendencias agrícolas mundiales, en la cual están ya varios ranchos de la zona costa, es la de productos orgánicos que garanticen la salud y que en ellos no se utilicen controles químicos para que el flujo de toxicidad sea mínimo.
En cultivos de crucíferas (col, brócoli, coliflor) los trips pegan muy fuerte, de hecho en la agricultura protegida de invernadero, estos trips son una de las plaga mas dañinas ya que en poblaciones muy elevadas tiene habilidad de ocasionar daño en la formación del fruto, desde la floración.
En este lapso, el trips, entra en el pecíbulo de las hojas de la flor y ataca el pimpollo del fruto generándole una herida permanente que se convierte en una cicatriz.
Una forma de descubrir el efecto de Trips, es en el pepino que cuando tiene crecimiento de talla comercial se ve rallado y como crece el fruto crece la lesión de este insecto diminuto que daña al pepino al tomate o al chícharo.
En los chícharos pueden verse porque causan puntos blancos y es en la realidad un huevecillo de trips que eclosiono y provocó daño físico y mecánico a la fruta.
Al trips se le ataca en algunos lugares con químicos, ya que existen productos específicos, pero se han tenido también resultados con insectos benéficos para bajar poblaciones porque los trips, se reproducen muy pronto, y su maduración es rápida, de huevo, larva, pupa y adulto listo para reproducirse, por lo cual una granja donde se cuente con machos estériles de esa especies resultaría efectiva en el combate.
Contar con una granja especializada en insectos benéficos representa un ataque inmediato contra una plaga cuya metamorfosis es muy rápida particularmente en primavera y verano donde es mayor la eclosión de huevecillos.
Es por eso, que los productores, deben estar preparados para contar en tiempo y forma con los machos estériles para un combate, y actualmente es necesario programar una compra y un viaje de los insectos para llevarlos a los ranchos afectados, cuando se debe plantear una situación real atacada en tiempo real y no llegar cuando el problema ya es irreversible.
Ochoa Zatarain, explicó que en Baja California Sur hay un criadero de crisopas, cuyo platillo favorito son los áfidos que afectan algunos cultivos, pero cuando se compran en Ciudad Constitución en Baja California llegan en muy mal estado.
En el caso de un criadero en la zona costa, se podría pensar en variedades de Catarinas que se alimentan de pulgones, de crisopas y de otras especies que pueden resultar un excelente control biológico especialmente en los invernaderos.