Es el nervio más ancho y largo del cuerpo, comienza en la región lumbar y baja por la pierna hasta el pie. Su gran tamaño lo hacen vulnerable a que la presión o daño provoque dolor intenso.
Mauricio Antonio Espíndola traumatólogo del Hospital General de Zona (HGZ) IV número 8 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Ensenada, explicó que cuando éste se reciente o irrita, se desarrolla una condición conocida como ciática, que se caracteriza por ocasionar fuerte dolor.
Una mala postura, el sedentarismo, hernia de disco, tirón o inflamación en la espalda; lesión o fractura de la pelvis, tumores o un sobresfuerzo físico son algunas de las posibles causas de este trastorno.
Señaló que los síntomas son variados, puede sentirse un hormigueo, adormecimiento o debilidad; sensación de ardor y dolor sordo que en algunos casos, es tan intenso que llega a imposibilitar el movimiento de la persona.
Dijo que frecuentemente comienza de manera lenta y puede empeorar después de pararse o sentarse, por las noches, al estornudar, toser y al doblarse hacia atrás o al caminar.
Advirtió que se debe acudir al médico para una atención inmediata si presenta fiebre inexplicable con dolor de espalda, enrojecimiento o hinchazón; debilidad y entumecimiento en glúteos, muslos y piernas; pérdida de control de esfínteres (incontinencia) y que el dolor empeore al estar acostado.
Finalmente, dijo que la prevención varía según la causa del daño, es importante evitar permanecer sentado o acostado por tiempo prolongado con presión sobre los glúteos, aplicar compresas de calor o de hielo ayudan a aliviar el dolor. Señaló que la mejor forma para disminuir el dolor es la práctica de ejercicio físico.