El Subsecretario del Sistema Estatal Penitenciario, Jesús Héctor Grijalva Tapia, informó que con el objetivo de implementar nuevos mecanismo de trabajo para la mejora continua en el funcionamiento de las cárceles en la entidad, se realizó una rotación de directores en los diversos penales de Baja California.
“La instrucción del Gobernador del Estado, Francisco Vega de Lamadrid y del Secretario de Seguridad Pública estatal, Daniel de la Rosa Anaya son las de no retroceder en las políticas que nos han permitido ir a la vanguardia en materia penitenciaria, sobre todo en cuanto a infraestructura, equipo tecnológico y de personal profesional y entregado a su trabajo”, aseguró Grijalva Tapia.
La rotación de los directores obedece a una dinámica que se ha empleado en diversas ocasiones a fin de transparentar el trabajo realizado para efectuar de manera adecuada el Modelo Estratégico de Tratamiento de Reinserción Social, así como mejorar los protocolos de atención a la población penitenciaria que actualmente es de 17 mil 485 internos.
El Subsecretario señaló que en los penales de la entidad prevalece el orden y alta seguridad, así como custodios en constante capacitación y evaluación de control y confianza, que a través de un modelo vanguardista ha sido posible transformar al Sistema Penitenciario de Baja California y colocarlo como uno de los mejores en el país.
En cuanto a la rotación de directores que se lleva a cabo como marca el Modelo Estratégico que privilegia además que las familias de los internos acudan a visitas en espacios seguros y de interacción digna con su ser querido, explicó que quedaron de la siguiente manera:
Cereso de Mexicali, Andrés Martínez Chávez. (antes El Hongo)
Cereso de Tijuana, Juan Enrique Méndez Meza (antes El Hongo II)
Cereso de Ensenada, Pedro Eugenio Garza Contreras (sigue igual)
Cereso El Hongo, César Daniel Ramírez Acevedo (antes Tijuana)
Cereso El Hongo II, Juan Manuel López Moreno (antes Mexicali)
Grijalva Tapia señaló que cada director tiene la encomienda de fortalecer las medidas de seguridad dentro de los penales siempre con estricto apego a los Derechos Humanos, aspecto prioritario para todo el personal que forma parte del Sistema Penitenciario de Baja California.