Una serie de casuchas, que con trozos de cartón, madera, metales y plásticos habían construido pordioseros en la zona de la Lagunita, fue desmantelada este lunes por personal de policía municipal que con maquinaria pesada, destruyó la invasión.
El lugar se ubicaba cerca de la Pedro Loyola, del lado del mar donde los pordioseros habían levantado ocho cuartos, gallinero, cocina y sembrado tomates, chiles y calabazas.
De acuerdo al Comandante de la Policía Municipal Víctor Hugo García Gasca, quien encabezó el operativo al mando de media docena de agentes, existía un reporte de que en este lugar habitaban personas que presuntamente cometían robos en las zonas aledañas.
En este sitio habitaban un total de ocho personas, todos alcohólicos o adictos, que desechados por la sociedad, habían habilitado estos espacios en donde dormían y guardaban sus escasas pertenencias.
Además se trata de una zona protegida que por estas personas se habían convertido el lugar lentamente en un basurero, donde se tenían todo tipo de materiales y restos ya que además actuaban como pepenadores.
En el lugar, tres de sus habitantes observaban con tristeza la destrucción de lo que ellos llamaban hogar, y explicaron que todos tenían algo en común, habían sido desconocidos por sus familias, esposas, padres e hijos y corridos de sus empleos debido al alcohol.
Ante esto, poco a poco se habían hecho amigos y empezaron a construir este sitio, con los pedazos que encontraban en distintos sitios, incluyendo lonas publicitarias y letreros.
Todos tenían sus propios colchones y ropa en medio de los cuartuchos, con alimentos que recuperaban de la basura, sobrantes de alimentos, de jabones, de champús, pastas de dientes.
Había una zona acondicionada como cocina con ollas viejas, y un fogón donde preparaban alimentos y justo a un lado, algunas plantas de tomate, chile y calabaza que ellos habían sembrado.
Tenían dos gallinas que fueron espantadas por los agentes, para que se salieran antes de que entrara la máquina para destruir el sitio y los restos del mismo, subirlo a un camión de volteo del Ayuntamiento.
Los tres habitantes fueron trasladados a seguridad Pública, de acuerdo a los agentes, pese a la revisión que se hizo, no tenían en su poder ningún tipo de droga o restos de la misma en el lugar.
Todos fueron llevados a seguridad Pública y lo único que pidieron les devolvieran son sus herramientas ya que todos trabajan eventualmente como albañiles, jardineros y casi cualquier actividad manual.